Muchas personas tiene pruebas de la existencia y inmortalidad del alma, de un modo claro e irrefutable para ellas; sin embargo, esas pruebas pueden no ser válidas para los demás. Desde hace siglos la Humanidad está buscando esas pruebas que convenzan a todos, y en especial por pensadores, científicos e investigadores espiritualistas, que piensan que semejante hallazgo sería una panacea para unir al mundo en un ideal común de fraternidad. Las pruebas personales pueden ser de distinta índole, entre ellas encontraremos las mediúmnicas, que parecen ser las más abundantes; han sido estudiadas modernamente por la Parapsicología en su afán por conseguir una explicación científica a estos fenómenos. La Parapsicología como ciencia tiene un gran porvenir, sobre todo porque va en busca de verdades de gran significación universal humana. Algún día esos misterios quedarán develados por la Ciencia y las verdades oficialmente ignoradas verán la luz; la principal esperanza es el reconocimiento general de que, a veces, fuerzas internas de la inteligencia todavía desconocidas, consiguen o provocan acontecimientos considerados científicamente inexplicables.
Ideología espiritista: evolución e historia
La ideología espiritista está repleta de conceptos que se han mantenido vigentes a lo largo de la historia de la Humanidad y que formaban parte de las creencias de las más antiguas civilizaciones. A lo largo del tiempo no sólo no desaparecieron sino que fueron evolucionando y afianzándose dentro de las creencias humanas: la inmortalidad del alma, los mensajes y revelaciones de seres espirituales, la invocación a los espíritus y difuntos, la reencarnación... y pasaron a integrar el contenido de la filosofía espiritista. Las invocaciones, mensajes recibidos y revelaciones de los seres espirituales propiamente dichos, las evocaciones a las almas de los muertos, nos demuestran que la mediumnidad era, en una u otra forma, perfectamente conocida. Es que ese mundo espiritual necesita para manifestarse, relacionarse, entrar en contacto con el plano físico, de las facultades especiales que poseen ciertas personas y esta comunicación se ha venido produciendo a través de los milenios; pero empieza a tener verdadera historia cuando aparece el Espiritismo. La primera manifestación espiritista de la que ha dado fe casi todo el mundo, fue en Hydesville (Estados Unidos), a través de las hermanas Fox, que oyeron golpes y ruidos misteriosos, que se presentaban abundante e inesperadamente y de tales características que era evidente que no se trató de ruidos casuales sino que provenían de una inteligencia invisible que deseaba comunicar algo.
Por supuesto que casi de inmediato aparecieron quienes trataron de desacreditar a las hermanas Fox para transformarlas en apenas unas tramposas, pero la novedad y la noticia del fenómeno se extendieron rápidamente por todo el mundo. El llamado Padre del Espiritismo, el Dr. Allan Kardec, nacido en Lyon en 1804 en una familia de magistrados, escribió el "Libro de los Médiums", donde especifica todas las facultades mediúmnicas existentes y que permiten relacionar inteligentemente los mundos espiritual y físico. Publicó otras obras como "El libro de los espíritus", "El Evangelio del Espiritismo", "El Génesis, los Milagros y las predicciones según el espiritismo", etc. Murió en París en 1.869, y sus teorías sobre el Más Allá, los Espíritus, la muerte, la Encarnación y reencarnación, constituyen la base fundamental del espiritismo. Algunas enseñanzas fundamentales del Dr. Allan Kardec se pueden sintetizar en frases como:"El espiritismo viene a establecer el reino de la caridad y de la solidaridad anunciado por Cristo. Su moral enseñada es, pues, esencialmente cristiana. Lo que Jesús dijo en parábolas, el espiritismo lo enuncia en términos claros y sin equívocos". Siguiendo a Allan Kardec, el espiritismo vendría a ser la tercera revelación de la Ley de Dios, si la Ley del Antiguo Testamento está personificada por Moisés y la del Nuevo Testamento por Cristo.