Es una medicina ancestral, donde
el cuerpo es un todo y para curarlo se debe integrar el alma
y el cuerpo. El término ayurveda puede definirse como energía
cósmica, y entiende que el ser humano vive en un microcosmo,
que a su vez esta en un gran universo. Esta medicina funciona
desde hace 3.000 años en oriente. Debemos aplicar esa energía
cósmica cuando nuestro cuerpo comienza a perder su regulación
y aparecen los bloqueos psíquicos y físicos que afectan nuestra
salud. Los expertos la suelen definir como medicina del organismo,
considerando al cuerpo como un conjunto de vibraciones. Si bien
en occidente se ha perdido toda conexión con lo natural, con
lo vital o con todo lo que esta alrededor, en la antigüedad
se creía en la relación del ser humano con tres elementos esenciales,
tierra, agua, fuego, aire y éter. Según los médicos ayurveda
cada uno de estos elementos tienen una característica propia
y ejerce su influencia en los seres humanos, en las planta o
en los animales.
Los doshas: Son
las esencias o centros de energía que gobiernan nuestra existencia.
Heredamos dos de nuestros padres. La energía de estos doshas
se va modelando a medida que crecemos y deben permanecer en
equilibrio para sentirnos bien. Si se desequilibran aparece
la desarmonía orgánica, es decir la enfermedad. La mala alimentación,
las alteraciones emocionales, la manera de desarrollarnos en
nuestra vida diaria, y la manera de integrar nuestras tristezas
y alegrías pueden perturbar los doshas. Dosha Pitta: Muestra tendencias ansiosas, nerviosas,
de celeridad y de rapidez y su naturaleza es energética y activa.
Dosha Kapha: A los que ya son de carácter tranquilo,
les aporta quietud y pereza. La calma, la serenidad, el sosiego,
la lentitud son su naturaleza. Dosha Vata: es una mezcla de acción y quietud, aunque
un poco extrema. Es como si anduviera sobre las dos anteriores.
El que posea este dosha puede pasar de un estado al otro, provocando
gran desconcierto.
Diagnósticos:
El médico ayurveda realiza una serie de observaciones, que difieren
totalmente de la medicina tradicional. Con estas observaciones
crea un perfil general de cómo se encuentra la persona, más
allá de lo que cuenta. Examina los gestos, la manera de sentarse,
la actitud que se toma a la hora en que se expresa el problema.
Observará también el brillo de los ojos y la intensidad de la
mirada. Verifica los pulsos de las sienes y de las muñecas,
para comprobar la vitalidad y la fuerza. Observa el calor interior,
es decir la forma en que se produce el proceso digestivo, analizando
la lengua.
El tratamiento:
Luego de todas las observaciones, se determina si el problema
es de origen psicosomático, es decir, si procede de la mente
o del cuerpo, y como ambos están afectados.
Es fundamental marcar las diferencias para determinar el tratamiento
y también para comprobar el estado del dosha. Hay que recordar
que la ayurveda trabaja sobre todo el organismo y no sobre un
lugar determinado, busca el equilibrio y la regeneración total.
La medicina ayurveda primero localiza el origen del malestar,
limpiando el cuerpo y regenerándolo después. Esta medicina considera
que el cuerpo que está enfermo, está sucio y se lo debe purificar.
No trata de evitar el dolor, sino que busca la manera de impedir
que se origine.
Se utilizan los siguientes tratamientos: El ayuno :
El evitar la ingesta de alimentos hace que el cuerpo se purifique.
Una de las mejores soluciones para restablecer el equilibrio
del cuerpo, es el ayuno, y este favorece la limpieza. Generalmente
se hacen ayunos de 24 a 36 horas consumiendo solamente agua,
eliminando de esta manera las toxinas que se acumulan en el
hígado, en el riñón o en el aparato digestivo. Las dietas: La ayurveda considera que no todos podemos
consumir cualquier tipo de alimento, pero esto no se refiere
a los contenidos grasos o de azúcares, se refiere a la relación
con la naturaleza de los dosha que poseemos. Por ejemplo no
debe comer carne aquel que tiene un Dosha Pitta o energético,
porque este alimento aumentará la vitalidad o la agresividad,
producirá lo que los ayurvedas llaman exceso de fuego orgánico.
Las actitudes: Además de la dieta, la actitud del paciente
ante la vida, es fundamental para la cura. Por lo que una persona
que tiende a encolerizarse debe evitar enfrentarse a situaciones
que le provoquen tensión, estrés, discusiones, por el contrario
una persona demasiado tranquila debe hacer todo lo posible para
adquirir vitalidad. Debe establecerse objetivos en los cuales
necesite desarrollar fuerza y empuje, encontrar nuevos retos,
intentar adquirir una actitud participativa. Los ejercicios: La medicina ayurveda contempla diferentes
ejercicios para recobrar el equilibrio. Por ejemplo la meditación;
la visualización; el yoga, que ayudará a restablecer el cuerpo
y el alma; los masajes, que ayudan a circular la energía estancada;
los ejercicios respiratorios, que mitiga o activa naturalezas,
entre otras funciones. Las medicaciones: La medicina ayurveda no contempla la
medicación farmacológica o química, sino que utiliza componentes
naturales, como extractos de semillas, de frutas y de plantas
que se consumen con jugos, infusiones o cápsulas con preparados
específicos. Tampoco contempla el uso exclusivo de medicamentos.
La importancia de los masajes: Los masajes están indicados
para recobrar el equilibrio, no se utiliza para relajar o distender
los músculos, sino para activar, mediante suaves fricciones,
la energía del cuerpo. Los masajes actúan sobre los centros
vitales, es decir, sobre los chakras, y se realizan durante
dos horas. El médico recetará los aceites correspondientes a
cada caso, y el terapeuta los frotará enérgicamente sobre el
cuerpo para activar las defensas del organismo y para poner
en acción la energía. Al finalizar los masajes, el paciente
es envuelto con telas de sedas para retener la energía. Para
integrarse con la energía será necesario permanecer así durante
15 a 20 minutos. Consultas
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